"Un acompañamiento restaurativo no se reduce a un solo encuentro, es un canino de prácticas
y facilitaciones graduales"
Si bien se cuenta con un mapa para brindar acompañamiento restaurativo a las personas, grupos, comunidades u organizaciones que lo necesitan, este no corresponde imperativamente a los pasos que se ha de dar en un camino restaurativo, cada sendero es único y debe ser transitado desde las necesidades y la progresión de los involucrados.
1. Diagnóstico: a través de la escucha plena y empática, así como del compartir de reflexiones, se indagan y reconocen necesidades y capacidades personales y colectivas presentes en los hechos.
2. Diseño colaborativo: construcción conjunta de la intervención y prácticas para involucrar a los implicados en la comprensión del proceso y la voluntad de colaboración en la facilitación.
3. Facilitación individual: acercamientos y conversaciones de forma personal con cada implicado, para escuchar vivencias, necesidades, activar responsabilidades y transformaciones y no repetición.
4. Facilitación grupal, si las necesidades exploradas lo indican y si hay garantías de reconocimiento y responsabilidad, se procede con la reunión de mediación o facilitación restaurativa, siempre brindando un entorno de conversación segura, restauración, sanación y sabidurías colectivas.
5. Informe y seguimientos: se comparte recomendaciones de seguimientos y transferencia de capacidades.
